En 1960 el dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo ordenó el crimen de las Hermanas Mirabal, el 25 de Noviembre se conmemora esas muertes y ha sido declarado el Día de la No Violencia contra la Mujer.
La República Dominicana sigue siendo uno de los lugares más brutales para las mujeres, el 80 % de las féminas sufren violencia de género, ya sea esta física, verbal o psicológica.
Por ello en el país caribeño se suman a esta campaña que pone a las mujeres en el centro, esa “minoría”, que “sostiene la mitad del cielo”, como decía Mao Tse Tung.
Desde 1999 que Naciones Unidas declaró esta fecha para concientizar y erradicar la violencia por cuestiones de género, se ha avanzado mucho en el reconocimiento de derechos y en el concepto de igualdad, aunque también se siguen viendo con mayor aspereza las rudezas de una sociedad patriarcal y machista que genera hombres desesperados y violentos, además de mujeres víctimas de toda crueldad.
El asesinato de Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, como en el caso del día del Trabajo o de la Mujer Trabajadora, son el símbolo de las mártires, de aquellos que debieron pagar el precio más caro, para que se tomara consciencia y la sociedad se asqueara de prácticas inhumanas y vergonzantes.
En su momento, el secretario general de la ONU Ban Ki- moon, se había referido a esta fecha de este modo “Acojo con beneplácito el coro de voces que piden que se ponga fin a la violencia que afecta a alrededor de una de cada tres mujeres a lo largo de su vida. Aplaudo a los dirigentes que están ayudando a promulgar leyes y a hacerlas cumplir, y a cambiar mentalidades. Rindo homenaje, además, a todos los héroes en el mundo que ayudan a las víctimas a sanar y a convertirse en agentes de cambio”, quizás se trate de un error de traducción, ya que hay lenguas que no tienen género en su vocabulario, pero hubiera sido también honorable recordar a las heroínas que son invariablemente agentes de cambio.