Los Papeles del Paraíso cuentan entre los nombres que se han revelado como posibles evasores fiscales y lavadores de divisas a personajes muy conocidos. Desde la reina de Inglaterra, Isabel II o su hijo, el príncipe Carlos, a la cantante colombiana Shakira o el Rey de la Soja, el empresario brasileño Blairo Maggi, ahora devenido ministro de Agricultura del gobierno de Michel Temer.
Pero también grandes empresas, como Glencore, la mayor exportadora de materias primas del planeta o la transnacional de origen brasileño Odebrecht, que aparece ligada a 17 empresas con sede en paraísos fiscales.
Los reyes de la opacidad vieron la luz con esta nueva investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés).
La investigación demuestra que la trama de triangulaciones de Odebrecht viene funcionando desde hace décadas y a través de empresas en lugares como Bahamas, las Islas Caimán o Malta. Algunas de ellas ya cerradas y otras todavía operativas.
Las inversiones de la realeza británica es de al menos 10 millones de Libras esterlinas y el Partido Laborista rápidamente ha exigido que se realice una investigación pública sobre esos fondos.
En el caso de la cantante Shakira, su domicilio está ubicado en Bahamas, aunque viva en Barcelona y tiene transferido el dinero de sus derechos de autor, unos 30 millones de euros entre Malta y Luxemburgo, países favoritos por quienes eluden el pago de impuestos.
Aparecen también la actriz norteamericana Keira Knightley y el cantante irlandés Bono, del grupo U2 por utilizar paraísos fiscales para realizar negocios y la cantante Madonna o el piloto de fórmula 1, Lewis Hamilton han evadido impuestos a través de cuentas offshore.
La lista es interminable y también salpica a hombres importantes de la política como el presidente de Colombia Juan Manuel Santos o los ex primeros ministros canadienses Brian Mulroney, Jean Chrétien y Paul Martin.