Hoy fue extraditado desde los Estados Unidos el expresidente panameño Ricardo Martinelli, sobre quien pesaba una orden de captura internacional por haber realizado espionaje durante su mandato entre 2009 y 2014.
Martinelli asegura ser víctima de una persecución política y se declara inocente, pese a llevar un año detenido en una prisión federal del estado norteamericano de Florida.
Los abogados del exmandatario intentaron infructuosamente el traslado a Panamá, pero las apelaciones no funcionaron y decidieron ceder a la orden de extradición, deteniendo su defensa.
El juez Edwin Torres determinó el pasado 31 de agosto en un fallo de 93 páginas la extradición de Martinelli, pues “satisface todos los requerimientos legales”, y ese veredicto fue ratificado posteriormente por su colega Marcia G. Cooke, informa Prensa Latina.
Para Torres hay suficientes indicios de culpabilidad de todos o alguno de los delitos de los que está acusado. Martinelli se había autoexiliado en los Estados Unidos en 2015, donde estaba legalmente en calidad de inversionista en ese país.