“Las diarias angustias de la Caja Pública tendrán un incierto clímax en diciembre y marcarán un poco grato punto de partida en 2020, que iniciará con cuantiosas cuentas por pagar”, dijo un analista
Punto Noticias. Para cerrar este año, el Gobierno deberá dejar pendientes pagos por USD $1.692 millones. Con ello, acumulará deuda por USD $628 millones con proveedores y USD $477 millones con el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa) e Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol). Además, quedarán obligaciones por USD $585 millones con gobiernos locales.
Uno de los miembros del Observatorio de la Política Fiscal, Jaime Carrera, considera que esta crisis de liquidez en la caja fiscal es consecuencia de que, al 30 de noviembre, la cuenta del Tesoro Nacional cerró con un saldo de USD $812 millones, pero en diciembre los gastos y pagos de amortizaciones serán superiores a los USD $3.000 millones.
Uno de los gastos, explican, es el desembolso de los más de USD $500 millones por el decimotercer sueldo del sector público. Este saldo cayó, el 6 de diciembre, a USD $603 millones.
El analista considera que el Gobierno debe recurrir a emitir certificados de tesorería (deuda a corto plazo), como ocurrió el 17 de diciembre pasado, a través de las bolsas de valores de Quito y Guayaquil.
“Las diarias angustias de la Caja Pública tendrán un incierto clímax en diciembre y marcarán un poco grato punto de partida en 2020, que se iniciará con cuantiosas cuentas por pagar”, recalcó Carrera.
Fuente: La Hora