París, 22 dic (Prensa Latina) El ministro francés de Salud, Olivier Véran, anunció hoy la posposición indefinida de un proyecto de ley de gestión permanente de urgencias sanitarias, que en pocas horas generó polémica y acusaciones de ataque a las libertades individuales.
La iniciativa fue presentada ayer en el Consejo de Ministros por el primer ministro Jean Castex y poco después en la Asamblea Nacional, bajo el argumento de preparar al país para futuras epidemias y evitar vacíos cuando en abril termine la urgencia sanitaria decretada frente a la Covid-19.
Considerado por la oposición, tanto de derecha como de izquierda, un proyecto inesperado e inaceptable, la propuesta incluía la facultad del primer ministro de condicionar los desplazamientos de las personas y su acceso a medios de transporte o a lugares al cumplimiento de medidas de control, entre ellas la vacunación.
El rechazo a la decisión gubernamental abarcó denuncias de una vacunación obligatoria de facto contra la Covid-19, después de que el presidente Emmanuel Macron adelantara una campaña de inmunización bajo los principios de la transparencia y la voluntariedad.
De acuerdo con el ministro Véran, la vacuna contra la Covid-19 será voluntaria, y acusó a la extrema derecha de desatar la polémica en torno a este tema.
Los críticos advirtieron que ni la mejor de las intenciones justifica impulsar un texto semejante, que vuelve a dejar al gobierno, y en particular a Macron, vulnerable, después de que el ejecutivo cediera en las últimas semanas ante el repudio al proyecto de ley de Seguridad Global y su artículo destinado a impedir la publicación de imágenes de policías en plena acción.
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