El Gobierno debió también participar de la conmemoración, se perdió una gran oportunidad de revisar la identidad y ese es un elemento sustancial, agregó.
Angélica Porras, jurista e integrante de Acción Jurídica Popular, destacó que el 24 de mayo de 2022 donde se conmemoraron los 200 años de la Batalla de Pichincha debió considerarse como una fecha de gran magnitud porque significa la construcción e inicio de la República, además del reconocimiento a la participación de los pueblos, líderes y mujeres.
“La relevancia no ha sido debidamente puesta en escena ni tampoco rescatados ni por las autoridades ni la población en general. Hay mucho desconocimiento y olvido de cómo debía convertirnos, crear, construir, nuestra identidad, ha sido una fecha olvidada”.
En ese contexto, destacó que el único trabajo destacable sobre el Bicentenario lo hizo la Prefectura de Pichincha, pues tanto al Municipio de Quito como al Gobierno les faltó profundizar en la importancia: “Se perdió una gran oportunidad de revisar la identidad y este es un elemento sustancial que debió ser más importante de lo que fue”.
“Hay que rescatar el papel de la Prefectura porque sino hubiese pasado desapercibido y eso hubiese sido grave, por la historia y el proceso libertario que significa”.
A criterio de la jurista, el neoliberalismo pretende tener seres humanos sin identidad, sin raíces, ni responsabilidad con nadie, porque supuestamente dependen de sí mismos, él solito es responsable del éxito o fracaso, es decir el humano es pobre porque quiere, de ahí que echar mano a las raíces históricas hace que esa idea pierda fundamento, de ahí que el presidente de la República, Guillermo Lasso, no le dio la importancia.