El Ministerio de Salud acogió la recomendación de la OMS y prohibió el suministro en los hospitales del país.
Punto Noticias.- A pesar de que el Ministerio de Salud Pública apoya la decisión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de suspender el uso de la hidroxicloroquina (plaquinol), como tratamiento para el COVID-19, en el país se reparte este medicamento.
Según investigaciones, esta pastilla incrementaría el riesgo de muerte en las personas diagnosticadas con el virus. Pero entre la comunidad científica mundial hay preocupación por la falta de un tratamiento específico que pueda aplicarse a los millones de pacientes infectados con coronavirus.
Aunque no se tiene evidencia científica sobre su efectividad han surgido una serie de tratamientos promocionados por distintos medios, por lo que el viceministro de Salud, Xavier Solórzano, indicó que se instruyó a los hospitales para que no utilicen ese fármaco. Pero varios colectivos sociales benéficos creados en el país han donado miles de dosis de esta medicina aduciendo que el medicamento ayuda a superar la enfermedad.
El Comité Especial de Emergencia por Coronavirus, liderado por el exalcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, en Guayaquil, por ejemplo, distribuyó en las últimas semanas 6.000 dosis en los hospitales públicos y clínicas privadas de la ciudad.
Las dosis también fueron entregadas a los municipios de Quito, Santo Domingo de los Tsáchilas y de Los Ríos.
Al igual que esta organización, el colectivo Salvar Vidas, encabezado por Guillermo Lasso, también repartió 915.000 pastillas.
Para el cardiólogo Diego Serrano la administración de hidroxicloroquina, sin supervisión médica, puede producir arritmias cardíacas y derivar en una muerte súbita del paciente.
Mientras, el epidemiólogo Francisco Pérez señaló que el país cuenta con suficiente evidencia científica que comprueba que el uso de esa medicación aumenta la tasa de mortalidad en pacientes con COVID-19.
En un comunicado, el Ministerio de Salud comentó que la suspensión de este fármaco no es doy, sino de hace varias semanas. Incluso, el equipo de especialistas en medicina crítica del hospital de Especialidades Eugenio Espejo, de Quito, abandonó el uso de este tratamiento para los enfermos con coronavirus.
Fuente: Ministerio de Salud, redes sociales