La comisión encargada de reformar el sistema de pensiones analizó al ‘afiliado promedio’, para proponer cambios que se aplicarían de forma progresiva, como un requisito para la jubilación.
La Comisión encargada de reformar el sistema de pensiones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), liderada por el economista Augusto de la Torre, no tocó dos puntos considerados sensibles por los afiliados: la edad mínima de jubilación y el porcentaje de aporte.
Actualmente, en Ecuador, los criterios para jubilarse van en función de la edad y los años de aportes:
- 60 años de edad, con 30 años de aportes (mínimo).
- 65 años, con 15 años de aportes (mínimo).
- 70 años, con 10 años de aportes (mínimo).
15% de los jubilados se ‘aprovecha’ del sistema
Esta costumbre es calificada por de la Torre como «perversa» e incluso en una de las conclusiones del informe se detalla que alrededor del 15% de los afiliados está eligiendo entre los dos últimos rangos mencionados, lo que permitiría que se «aproveche» del sistema.
«Estas personas se afilian a los 60 años, aportan sueldazos durante 5 años, completan los 10 años de aportes hasta los 70 y reciben por el resto de su vida una pensión que representa la mitad de los 5 mejores años de aportes», explica de la Torre.
La propuesta de reforma busca modificar estas opciones, para que la pensión se ajuste proporcionalmente a los años de aportes, con los años de beneficio recibido (la pensión), evitando que saquen partido del sistema.
La mayoría de afiliados se jubila con más de 35 años de aportes
Para garantizar una transición adecuada, se plantea mantener la edad mínima de jubilación en 60 años, pero aumentar gradualmente los años de aportes requeridos, con una tabla progresiva para el ajuste hasta pasar de 30 a 35 años en el primer criterio. De la misma forma en los dos criterios siguientes en los que tampoco se perjudicaría la edad base de jubilación.
Según la información analizada por la comisión y entregada por el IESS, como los exámenes actuariales de los últimos cinco años, la mayoría tiende a jubilarse con más de 35 años de aportes. Esa habría sido la razón por la que la comisión decidió proponer este cambio en el requisito para la jubilación.
» Ya en la práctica los jubilados están escogiendo esta opción. De manera que esta propuesta no esta pensada para cambiar el comportamiento promedio considerando que obviamente en Ecuador se obtiene la mejor pensión posible hasta completar 40 años de aportes. Por eso, los trabajadores prefieren mantenerse en sus trabajos hasta completarlos», explica de la Torre.
Por ejemplo, Armando empezó a trabajar a los 22 años; cuando completó 30 años de aportes tenía 52 años de edad; por lo que decidió seguir trabajando hasta completar la edad de jubilación. Es decir, se jubiló cuando tenía 38 años de aportes y 60, de edad. Comenta que tomó esta decisión porque su sueldo iba incrementando con el paso de los años en su empresa, al quedarse más tiempo, este sueldo sería considerado para su jubilación por lo que está incrementaría.
Sin embargo, aunque varias personas consultadas, a pocos años de cumplir los 30 de aportes, comparten esta decisión; otras consideran que ese tiempo, hasta cumplir 60, lo pueden dedicar a cualquier otra cosas que nos sea permanecer trabajando, por lo no consideran que esto deba ser una norma.
Un sistema de reparto
La comisión identificó como clave en la crisis que estaría atravesando el IESS a la demografía. El problema se evidencia en que el número de jubilados crece a un ritmo del 6% anual, mientras que el número de aportantes solo aumenta al 2.5% por año.
Por ejemplo, en 2012, hace una década, había casi 10 aportantes por cada jubilado, pero ahora solo hay 5 aportantes por cada uno, la alarmante proyección de la comisión, es que en el futuro cercano esta cifra disminuya aún más a solo tres aportantes por jubilado; algo que debe ser evitado.
El economista de la Torre advierte que este cambio demográfico acelerado podría dejar al sistema sin suficientes recursos para pagar las pensiones, llevando a una crisis social si no se implementan reformas adecuadas.
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