Durante la operación, fueron detenidas cinco personas, cuatro de nacionalidad albanesa y un español que actuaba como testaferro de la banda.
En una operación conjunta, agentes de la Policía Nacional y el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria española desmanteló una peligrosa banda de narcotraficantes de origen albanés que operaba en la provincia de Alicante, España. En un golpe al tráfico de drogas, se logró confiscar más de 4,3 toneladas de cocaína, convirtiéndose en el mayor cargamento de droga decomisado en la zona.
Las investigaciones se iniciaron a raíz de información proporcionada por la Agregaduría de Interior de la Embajada de España en países como Bulgaria, Ucrania, Albania, Macedonia del Norte y Chipre.
El modus operandi de la banda consistía en ocultar la droga en contenedores de banano ecuatoriano contaminados con paquetes de cocaína, los cuales llegaban inicialmente al puerto de Málaga, en el sur de España. Desde allí, trasladaban discretamente el cargamento a una nave del Polígono Industrial Llano del Espartal de Alicante, donde utilizaban maquinaria para la descarga de la droga ecuatoriana que «viajaba» en camiones hasta la ciudad española.
Durante la operación, fueron detenidas cinco personas, cuatro de nacionalidad albanesa y un español que actuaba como testaferro de la banda. Estos individuos se valían de diversas estrategias para evitar el radar policial, incluyendo viajes al extranjero y la utilización de vehículos registrados a nombre de empresas aparentemente legales, así como del propio testaferro.
Este impactante decomiso se suma a otras recientes incautaciones de droga procedente de Ecuador, como las siete toneladas encontradas en el puerto de Amberes. La colaboración entre países y la labor incansable de las fuerzas de seguridad españolas han sido fundamentales para desmantelar esta operación delictiva y poner tras las rejas a sus responsables.