Rechazó el maltrato recibido por parte de la ministra de Gobierno, policías y militares.
Punto Noticias. Jaime Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) advirtió que han denunciado públicamente y enviado documentos a las Naciones Unidas, por la situación que vive nuestro país y por amedrentamiento del que ha sido víctima el movimiento indígena, por parte del gobierno, para debilitarlo.
Señaló, de manera enfática, que los pueblos y nacionalidades han cerrado todo diálogo y acercamiento con el gobierno del presidente Lenín Moreno, a pesar de los insistentes llamados del mandatario y de sus ministros de Estado, según reveló.
Para Vargas, su lucha va más allá de la derogatoria del decreto ejecutivo que elimina el subsidio a los combustibles. La lucha, insistió, es por sus territorios, ríos, derechos colectivos, justicia indígena, por el respeto a la autodeterminación.
Según el dirigente de la CONAIE, los pueblos y nacionalidades se han convocado con mayor fuerza, en cada uno de sus territorios, y rechazan frontalmente los atropellos y la represión de la fuerza pública (Policía y Fuerzas Armadas).
Contó que, lastimosamente, los pueblos indígenas en los enfrentamientos se han encontrado con sus propios hijos, policías y militares. “Mientras los padres están luchando, mientras sus mamitas están defendiendo su vida, su territorio, sus hijos están cumpliendo las órdenes de un gobierno nefasto, antipopular”, manifestó Vargas.
Rechazó lo que dijo son calificativos por parte de la ministra de Gobierno, María Paula Romo, quien tildó a los indígenas de antisociales, ladrones, terroristas. Al contario, apuntó Vargas, el movimiento indígena lucha por los grandes intereses de los colectivos y el pueblo ecuatoriano.
Justificó la decisión de los pueblos y nacionalidades de declarar sus territorios en estado de excepción, con la advertencia de que serán sometidos a la justicia indígena los agentes, policías, militares, que ingresen.