La Fiscalía General del Estado colocó en su página web los chats de WhatsApp de algunos implicados, entre otros funcionarios judiciales, abogados y policías.
Suena imposible. Pero sí, el coronel de Policía, Neycer Lenin M. mantenía conversaciones con Leandro Norero, quien hizo su fortuna gracias al lavado de activos, producto del narcotráfico. En uno de los diálogos, compartidos por la Fiscalía General del Estado en su web, se lee que por WhatsApp le pregunta si ya llegó al punto. Una vez que llega, le consulta si ya le entregaron. El policía responde que sí y le agradece diciéndole: «que Dios le triplique».
En agosto del 2022, además, el policía Neycer Lenín M. le asegura al narcotraficante que le contará cuando conozca de operativos que se desarrollen. Incluso le pasa unos datos que le pasa un primo de la Policía Judicial.
Ese día también le dice que a sus compañeros del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM) y de la Dirección General de Inteligencia ya les dijo que les lleva un premio.
La fiscal Diana Salazar aseguró que este coronel de Policía se reportaba a Leandro Norero, como si se tratara de un subalterno. Recibió a cambio sobornos, como dinero para el viaje de su hija; para costear un tratamiento médico y más.
Neycer Leniín M. se encargaba de custodiar la mansión de Leandro Norero en Riberas del Batán en Samborondón. «Precautelaba los bienes del narco y no del Estado», sostuvo Diana Salazar.
En 2022, Norero recibió una acción de protección para recuperar una mansión en Ribera del Batán, en Samborondón. Allí la Policía habría encontrado USD 6 millones en efectivo. Esa propiedad, supuestamente, era de Xavier Jordán, involucrado en la venta de medicina a hospitales públicos. Pero esa es solo una de 11 propiedades que habría acumulado Norero, producto de sus actividades delictivas.
El 25 de mayo del 2022, Leandro Norero fue detenido, en un operativo, que involucró allanamientos en Guayas, Manabí y Santa Elena. Lo asesinaron en la Cárcel de Cotopaxi, el 3 de octubre del 2022.