Francisco Ordóñez, presidente de la Casa de la Cultura núcleo de Pichincha, lamentó que la Ley de Cultura aún no se cumpla en plenitud pues la Sede no cumple con sus competencias ni tampoco deja que se ejecute el trabajo de los núcleos, a lo que se suma una administración presupuestaria cuestionable pues, dijo, se ha mermado los ingresos de las provincias.
“Recibimos un presupuesto que corresponde a la tercera parte de lo que deberían darnos (…) Pichincha, incluso, tiene menos presupuesto que Azuay y Guayas”, agregó Ordóñez al indicar que la normativa indica que el trabajo de territorio es de los núcleos y la planificación le corresponde a la sede, pero esto no se cumple y por tanto se perjudica la gestión de las provincias.
Sin embargo, remarcó que existe un motivo de alegría y celebración para el núcleo Pichincha pues el Ministerio de Vivienda, le entregó en comodato un predio patrimonial en el Centro Histórico de Quito, que ya está restaurado y tiene una amplitud suficiente para funcionar.
“Está en la calle Manabí entre la Cotopaxi y Cuenca”, puntualizó.