Varias personas se concentraron esta mañana en las afueras del Complejo Judicial Norte, para pedir que se reabra la clínica La Primavera.
La manifestación la realizaron con pancartas y gritos, ya que en ese lugar se tenía previsto desarrollar una audiencia para vincular al dueño de la clínica, Diego Alarcón, en el proceso que se sigue por presunta “asociación ilícita”. Alarcón no se presentó, pero sí asistió su hija Daniela, con un bebé de seis meses, para pedir que se “haga justicia”, al tiempo de asegurar que el establecimiento contaba con permisos de funcionamiento hasta noviembre de este año, y que no se le dio tiempo para hacer mejoras.
Por este proceso están detenidos Liliana Ruales, esposa del propietario, y el galeno Guillermo Tipán, a quienes las autoridades acusan de haber ejercido especialidades médicas sin contar con un título profesional correspondiente.
En el plantón participaron extrabajadores, vecinos y madres con niños en brazos y aseguraron que defienden a ese centro porque allí nacieron sus hijos mediante el método de parto humanizado. (La Hora)
Escrito por Daniela Escobar