No olvidemos expresiones de altos funcionarios de los Gobiernos de Moreno y Lasso señalando que se maten entre ellos, agregó.
Billy Navarrete, director del Comité Permanente de la Defensa de los Derechos Humanos, indicó que las masacres ocurridas la semana pasada en las cárceles de Cotopaxi y Guayas, son parte de una larga secuencia que inició en 2019 y que ya suman más de 600 personas fallecidas.
“Ya son 12 masacres (…) No ha dejado de pasar esta situación, se repite de manera constante”.
Para el especialista, los reiterados episodios de violencia al interior de los centros penitenciarios demuestran permisividad y naturalización, que señalan de manera directa al Estado y al Gobierno.
“No olvidemos expresiones de altos funciones de este y el anterior Gobierno señalando: allá que se maten. Esto da cuenta de una conducta institucional”.
Rechazó el maltrato y la criminalización a la que han sido sujetas las familias de los privados de libertad y que fue más evidente el miércoles 4 de octubre cuando miembros de la policía nacional gasearon y hasta golpearon a quienes esperaban por una respuesta de si sus parientes estaban o no con vida.
“Se señala a las familias como responsable del tráfico de armas y sustancias ilícitas, han sido sujetas a revisiones abusivas y eso da cuenta de por dónde se trata de justificar el tráfico de armas”.
En entrevista a Ecuavisa, subrayó que no solo se trata de fortalecer la policía sino también de trabajar en temas más profundos.
“El SNAI es un mecanismo inútil para todo lo que vive Ecuador”.
Instó a revisar el SNAI y su operatividad pues resulta ser un organismo que queda en el vacío, de ahí que, reiteró la importancia de reformular la entidad e incluso evaluar y pensar en los efectos que sí tuvo el Ministerio de Justicia para generar políticas de rehabilitación como derecho humano.