El año 2019 fue declarado por Naciones Unidas como el Año Internacional de las Lenguas Indígenas, para de esta manera protegerlas y concientizar sobre el riesgo que corre la preservación de sus idiomas y costumbres en estos años de globalización homogeneizante.
En palabras de la Oficina Regional de Cultura para América Latina y el Caribe de la ONU se trata de “llamar la atención mundial sobre los problemas que afrontan las lenguas indígenas, así como su importancia para el desarrollo sostenible, la reconciliación, la buena gobernanza y la consolidación de la paz”.
La organización destaca que el desarrollo y la reconciliación de los grupos humanos se dio a través de estas lenguas, que fueron vehículo de la comunicación, la educación e integración entre las comunidades.
El próximo 28 de enero tendrá lugar en la capital francesa el lanzamiento de esta iniciativa con la presencia de representantes gubernamentales de alto nivel, además de pueblos indígenas y miembros de la asociedad civil, académica y varias instituciones públicas y privadas.
La ONU expone que se considera que existen 6700 idiomas en el mundo, de los cuales cuatro mil son hablados por pueblos indígenas. De ellos, se calcula que 2.680 corren riesgo de desaparecer, por lo que es necesario una acción global para preservarlos.
La Organización para el Año Internacional de las Lenguas Indígenas planteó cinco razones para promover la conservación y cuidado de las lenguas indígenas:
- Generan conocimiento y comprensión sobre el mundo.
- Son consideradas un desarrollo sostenible, pues mediante su lenguaje y cultura consolidan e incentivan la paz y reconciliación.
- Estas lenguas son consideradas como un derecho humano fundamental en la libertad de los pueblos indígenas.
- Desarrollan la inclusión social y la alfabetización, lo que contribuye a reducir los niveles de pobreza.
- Son consideradas como fuente de diversidad de valores culturales y de patrimonio histórico