La legisladora Marjorie Chávez considera que los extremos ideológicos hacen daño.
Punto Noticias. La Carta de Madrid, suscrita el 26 de octubre de 2020, es una iniciativa del partido ultraderechista español Vox, en defensa de lo que considera libertad y democracia en las naciones iberoamericanas, en contra de lo que llama el avance del comunismo y de los regímenes totalitarios, a los que considera como una seria amenaza para la prosperidad.
Lo que le llama la atención a Fernando Carrión, profesor investigador de FLACSO, según dice, es que esta Carta fue escrita en Madrid para hablar sobre América Latina, básicamente para confrontar el pensamiento y los principios que se consolidaron en dos espacios específicos: el Foro de Sao Paulo y el Grupo de Puebla, que tienen una posición progresista.
Cuestiona que desde Madrid se quiera confrontar estos pensamientos, para lo cual se firma la Carta y se invita a gente que vive en Latinoamérica, para simplemente se adhiera.
A su criterio, lo lógico, si quieren confrontar un tipo de posición surgido en América Latina, es que se enfrente en América Latina, no venir desde fuera. Está de acuerdo con que se trata de una forma de neocolonialismo.
Carrión comentó que en la Carta se añaden temas complejos como el narcotráfico, que está en auge en sociedades que poco tienen que ver con el comunismo o socialismo, pero que son los que producen las mayores riquezas. Puso como ejemplo a EE. UU., que es el primer país del mundo en consumo de coca. Y no solo es consumo sino también lavado del dinero del narcotráfico y una forma de construir integración del mercado legal con los ilegales.
Para el experto, que la Carta de Madrid vincule estos asuntos, de manera explícita, a sociedades que tienen políticas progresistas, no tiene ningún sentido.
En el caso de Ecuador, varios personajes políticos han firmado esta carta, entre quienes están los asambleístas socialcristianos Henry Kronfle y Esteban Torres. Este último declinó la entrevista en Pichincha Universal, que ya había aceptado, con la justificación de que debía someterse a una operación de última hora.
También lo hizo Geraldine Weber, contó su compañera de bancada Marjorie Chávez, quien señaló que a ella no se acercaron para proponerle que suscriba el documento. “Seguramente también conocen la forma de trabajar, el temperamento y la manera de ver las cosas de cada uno de los asambleístas”, comentó.
En opinión de Chávez, la propuesta nacionalista de Vox parece que quiere recuperar algo que se ha perdido, pero un poco fuera de tiempo.
La legisladora cree que estos puntos de vista extremos, como los de Vox, han hecho mucho daño, por lo que considera que hay que alejarse de ellos. Muchos partidos de derecha e izquierda, en Europa, han tenido que irse hacia el centro y pocos son los que han tomado posturas extremistas, en temas de migración o derechos de las minorías, apuntó.
Reiteró que los extremos siempre han causado mucho daño, como demuestra la historia. La extrema derecha ocasionó la peor guerra que ha conocido la humanidad, pero también la extrema izquierda ha causado muerte y desolación, como en Camboya o Venezuela, sostuvo.
Manifestó que las organizaciones políticas que van hacia los extremos tienen poca representatividad en los país. El problema no son las cartas o los foros, son los individuos, que, escudándose en estos, pueden aprovechar estas herramientas para perseguir sus intereses o una agenda política extrema. De eso debemos tener mucho cuidado, reflexionó la asambleísta del PSC.