Ayer el ministro haitiano de Cultura, Jean-Michel Lapin, decidió cancelar el carnaval nacional que tiene lugar cada año en la ciudad de Gonaives. Justificó la decisión en los hechos violentos registrados durante las últimas semanas en las movilizaciones que piden el fin de la corrupción y la renuncia del presidente del país Jovenel Moise.
Lapin, en rueda de prensa, aseguró que no se pudieron cumplir los tiempos de preparación necesarios de los festejos, pero las intensas movilizaciones que continuaron en febrero de este año, cambian los planes.
La parálisis de la vida económica y social es casi completa, ya que continúan barricadas en puntos clave de la capital Puerto Príncipe y otras ciudades.
Puerto Príncipe y Pétion-Ville ya habían desistido de realizar carnavales este año, siendo los dos mayores del país y ahora se suma el de Gonaives, que era organizado por el ministerio de Cultura.
A lo largo de los años, el carnaval siempre se realizó porque tiene un fuerte anclaje en la sociedad haitiana, queda por verse qué tipo de repercusión tendrá este ataque a la tradición y a las festividades de un pueblo que tiene pocos motivos de alegría.
Solo en el año 2010, se suspendieron los carnavales luego de que en enero el país sufriera un fuertísimo terremoto en el que murieron cientos de miles de personas.