El dirigente de la transportación reconoció que también hay conductores que lo hacen, a propósito.
Punto Noticias. De acuerdo con las medidas dispuestas por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional, para el sector del transporte de pasajeros, los buses, de las ciudades que están con semáforo amarillo, pueden llevar pasajeros hasta completar el 50% del aforo de la unidad, con el fin de respetar el distanciamiento social, para evitar contagios con coronavirus.
A pesar de esto, la resolución no se cumple en Quito, en donde se observa a diario que los buses llevan más pasajeros que los permitidos, personas amontonadas y usuarios que viajan de pies.
Jorge Yánez, dirigente de la Cooperativa Translatinos, considera que, para cumplir con esta disposición para la ocupación de las unidades, es necesaria la colaboración de la ciudadanía, que no respeta el aforo permitido.
“Si vemos que el vehículo ya está con el aforo completo, esperemos pacientemente a que llegue otro vehículo para poder movilizarnos”, solicitó Yánez.
En opinión del dirigente, si hay colaboración de las personas, a lo mejor se pueda pasar al color verde del semáforo de riesgos y si no tendremos que volver a un confinamiento total, lo que sería perjudicial para toda la sociedad, alertó.
Yánez dice que es muy complicado que el conductor de un bus evite que la gente se suba a la unidad, cuando hay paradas en las que se bajan dos personas, pero hay 10 personas que quieren subir, debido a lo cual se han presentado agresiones en contra del chofer, que no permite que aborden.
El dirigente del transporte también reconoció que hay choferes que, con lo que denomina viveza criolla, llevan más pasajeros de los permitidos para obtener mayores ingresos económicos.
Ante esta situación, llamó a la ciudadanía a que exija el cumplimiento de solo sentados, caso contrario, que denuncien al 911.