El Estado perdió el año pasado cerca de USD 200 millones por el subsidio a este combustible.
Punto Noticias.- Con la creación de una mesa sectorial para analizar los costos de la comercialización del gas licuado de petróleo (GLP), el tema de los subsidios regresará a debate.
La decisión de crear esta mesa fue respaldada por los representantes de los distribuidores y transportistas de GLP y el ministro de Energía, José Augusto Briones, quienes se reunieron este martes 28 de enero en las instalaciones de Petroecuador, en el noroeste de Guayaquil.
Stalin Poveda, presidente de la Cámara Nacional de Distribuidores y Transportistas de GLP, propuso que se realice una auditoría a las comercializadoras de gas, así como una revisión de la estructura de costos para la comercialización de este derivado del petróleo.
Según el dirigente, con la nueva disposición de facturar electrónicamente la bombona de gas doméstico a USD 1,60, los distribuidores dejaron de facturar a USD 1,27 el cilindro para hacerlo a USD 1,55 o USD 1,60.
Añadió que esta situación genera que las comercializadoras retengan esa diferencia de manera indebida y pese a que todos conocen sobre esa estructura no la han revisado.
Explicó que al revisar la estructura se analizaría el margen de utilidad y el precio final del tanque de gas. Aunque dijo que no se buscaría alterar ese costo al cliente.
Sugirió que se debe cambiar el concepto de la estructura que en la actualidad es global al ser entregada en su totalidad a las comercializadoras, para retornar a las prestaciones de servicio, con el fin de que se establezca un valor por cada kilo transportado o vendido.
Según información subida por un medio de comunicación, Petroecuador despachó cerca de 14 millones de barriles de GLP en 2019, unos 473 mil barriles más que en 2018, pero perdió cerca de USD 200 millones por el subsidio a este combustible.
La demanda de GLP para uso doméstico representó, el año pasado, el 88,64% del total del consumo de este combustible.
Por la comercialización de GLP para distintas áreas, Petroecuador recaudó USD 195,7 millones. Pero hay que tomar en cuenta que el país apenas produce el 20% del gas que consume, por lo que para satisfacer la demanda debe importar el 80% restante a precios internacionales.
Sin embargo, el gas licuado de petróleo se vende a un precio fijo y subsidiado, de modo que el balance entre los ingresos y los costos de comercialización del GLP difieren y resultan negativos para el país.
Para atenuar un poco esta situación, el Gobierno estableció que, desde el 1 de enero de 2020, los distribuidores emitan facturas electrónicas por la comercialización de cada cilindro de gas.
Fuente: El Universo, Primicias, redes sociales