Otras denuncias se relacionan con la limpieza, alimentación y atención a los pacientes.
Aunque la venta de medicamentos dentro de hospitales públicos de Ecuador está totalmente prohibida, Miriam Duarte denuncia que un doctor del Hospital de Especialidades Eugenio Espejo le solicitó USD 83, para adquirir un fármaco para su madre, internada por cáncer.
“Ayer ingresé con mi mamá que tiene cáncer. Como iniciaba la quimioterapia tuve que comprar la medicina. Un doctor me pidió USD 83, lo compré dentro del hospital”, asegura.
Fuera de este hospital, ubicado en Quito, Ivonne Bonilla también tiene una denuncia relacionada con los medicamentos, con la atención, pero sobre todo con los útiles de aseo. Comenta que en el Eugenio Espejo no le han facilitado ninguna medicina, pero sí le han enviado a adquirir bastantes insumos.
«Me pidieron cuatro ampollas para el vómito, no sé si le pusieron a él tantas. También me solicitaron pañitos, jabón, pasta dental y enjuague bucal, pero cuando subí a verle no le habían lavado los dientes y tenía mal olor. Además, desde que ingresó, recién a los cinco días le hicieron una radiografía”, comenta.
Esperando también en la puerta de emergencia está Lila Mayorga, quien tiene un familiar con hepatitis, en el hospital, desde hace ocho días. Su denuncia se refiere a la falta de alimentos. Asegura que tenían que enojarse o ponerse exigentes para que le den de comer en horarios adecuados.
“Tenían que hacerle muchos exámenes, no contaba con ningún suero, veíamos que se ponía cada vez más flaquito y sentíamos que se nos iba. También nos dijeron que no tiene una máquina para hacerle exámenes. Nos indicaron que ya han hecho una solicitud al Ministerio de Salud, pero los médicos están de vacaciones”.
El gerente del lugar, Andrés Corral, defiende al Hospital Eugenio Espejo de las denuncias de los pacientes. Asegura que la venta de medicamentos dentro de la institución es ilegal y no se puede permitir.
“Nada se puede comercializar dentro de hospital, hablamos de manera especial de medicamentos y dispositivos”. Dice que no es la primera vez que reciben este tipo de denuncias, pero que no pueden proceder, ya que no se conoce los nombres ni detalles de quienes lo hacen.
Sin embargo, frente a las acusaciones, el hospital emprendió una campaña, mediante carteles e infografías, para recordar a los usuarios que la atención y los insumos son completamente gratuitos. También realizan investigaciones para identificar a los involucrados.
Sobre las persistentes denuncias de falta de medicinas, Corral indica que el abastecimiento ha alcanzado el nivel más alto en los dos últimos años, cubriendo un 87%. Asegura que los medicamentos que faltan, como antiepilépticos o psiquiátricos, es por la falta de entrega de proveedores y otros que no se comercializan al momento a nivel nacional.
Ante las denuncias sobre la limpieza de los pacientes dice que son denuncias generales.
Esto no sucede unos pasos más allá del Eugenio Espejo, en la Maternidad Isidro Ayora, donde su gerente, el doctor Alex Robalino, menciona que todo está en completa calma y normalidad. Afortunadamente con él sí coinciden las madres internas quienes, resaltan la buena atención de la maternidad para ellas y sus bebés.
Por otra parte, desde la Alianza Nacional por la Salud, expresan que los medicamentos que presentan mayor escasez son los de especialidad, como los de cáncer que son insuficientes.
“Hay pacientes con cáncer de estómago o de pulmón que están siendo afectados, porque son medicamentos de alto costo que no acceden a los tratamientos de manera permanente”, comenta Gabriela Garcés, secretaria de la Alianza. Añade además, que es muy difícil que los hospitales cuenten con medicinas para tratar las enfermedades raras.
Solicitamos datos oficiales sobre la llegada de medicamentos a las instituciones de salud del Ministerio de Salud Pública, pero hasta el cierre de este reportaje no obtuvimos una respuesta.
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