La tarde de este sábado 7 de abril, el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se entregó a la policía, luego de abandonar la sede del Sindicato de los Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo en medio de un tumulto que lo respaldaba.
La entrega de Lula demoró varias horas este sábado 7 de abril después de un discurso dado esta mañana e incluso casi fue impedida por militantes que bloquearon los portones y no dejaron salir su automóvil.
Medios brasileños señalan que Lula salió caminando en medio un enorme tumulto, subió a un automóvil y partió, seguido de inmediato por un convoy de la Policía Federal.
Posterior a esto un convoy policial trasladó al líder político hasta el aeropuerto de Congonhas de Sao Paulo para luego viajar hasta Curitiba, lugar donde se encuentra el centro de retención. Lula fue sentenciado a 12 años y un mes de prisión.