Tras tres noches consecutivas de protestas en Túnez, la policía anunció que hubo 565 detenciones, por la comisión de destrozos.
Los manifestantes se oponen a la nueva ley de finanzas, que encarece el combustible y productos de primera necesidad, una inflación del 6 % en el año 2017, un desempleo del 15 % y en aumento y medidas de austeridad que aplica el gobierno.
El uso de cócteles molotovs y piedras por parte de algunos manifestantes fue imitado por las fuerzas policiales que usaron gases lacrimógenos
Desde el lado de los manifestantes llovían piedras y cocteles Molotovs, a las que los policías. En Teburba, una ciudad cercana de la capital tunecina, el lunes por la noche había muerto un manifestante de 43 años por la represión, lo que degeneró en las protestas violentas del miércoles por la noche.
El gobierno denunció el ataque a un puesto de policía en la ciudad de Thala, saqueos a supermercados y unos 70 policías heridos.
El primer ministro, Youssefl Chahed, acusó a los partidos de izquierda y las redes mafiosas de estar detrás de la violencia y aseguró que la ley se aplicará con firmeza contra los revoltosos.
El movimiento Fech Nestannew (¿Qué esperamos?), una red de activistas jóvenes quienes fueron los primeros en llamar a protestar, lo hicieron de manera pacífica, explicaba Radio France Internacional.