Para la actual administración la prioridad es que la ciudadanía deje el auto en casa.
El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, ratificó que uno de los objetivos de su administración es cambiar la flota de buses a diésel por eléctricos, así como comprar nuevos troles, a fin de mejorar el servicio a la ciudadanía.
“He pedido que se preparen bases para un proceso que supone una inversión en gestión inteligente de transporte”, dijo Pabel Muñoz.
El objetivo de la Alcaldía es que la ciudadanía deje el auto en casa y prefiera el uso del transporte e incluso la bicicleta pública, sobre esta última, informó que está a la espera de una reunión con la Contraloría, para llegar a un acuerdo respecto a sus recomendaciones para echar en funcionamiento este servicio.
Pabel Muñoz explicó que el contrato de la bicicleta pública se firmó con la ESPE, pero la universidad solo ha instalado seis paradas con 200 bicicletas, por pedido de Contraloría a fin de estudiar la demanda del servicio en Quito.
“Esto no me deja contento porque tenemos más de 500 bicicletas dañándose en bodega. Además es complicado que se estudie la demanda de un servicio que no se brinda”, recalcó el alcalde de Quito.
También enfatizó en la importancia de echar a andar la bicicleta pública junto a El Metro pues mejorará la movilidad en Quito. De seguir al ritmo actual, mucha gente no podrá sacar sus autos del parqueadero debido al colapso al que llegará la ciudad por el tráfico.
“Tenemos que buscar formas de estimular el uso de un medio de transporte que no sea el automóvil”.
Además mencionó que entre el 70% y 80% de la ciudadanía se mueve en transporte público y por tanto la ciudad no puede estar pensada para autos particulares sino para peatones.