Para los legisladores de la Revolución Ciudadana, el gobierno de Lenín Moreno, ha dado un viraje a su política internacional, con su posición frente al gobierno de Venezuela y la situación de esta nación.
Incluso, para la asambleísta Marcela Aguiñaga, el Ejecutivo ecuatoriano raya en una injerencia en las políticas internas del gobierno venezolano y prueba de ello es que, en la Organización de Estado Americanos (OEA), Ecuador no votó con la tesis del grupo del Alba y se alineó a los países que condenaron al presidente Nicolás Maduro.
En cambio, el parlamentario Luis Fernando Torres, del PSC, espera que el gobierno ecuatoriano se alinee completamente a la posición de los países que condenan a gobiernos dictatoriales, como Venezuela y Nicaragua, según su criterio.
La convocatoria a una consulta popular que refrende o no los resultados de las elecciones presidenciales del 20 de mayo pasado, en Venezuela, propuesta por el mandatario ecuatoriano para resolver la crisis en esa nación, a criterio de la legisladora Wilma Andrade, de la ID, no es una salida apropiada.
Si bien está de acuerdo que los resultados de la consulta popular pueden ser amañados por el gobierno venezolano, la asambleísta del oficialismo Karina Arteaga, defiende esta propuesta y plantea además un diálogo nacional en ese país centroamericano, como sucedió en Ecuador.