La celebración de la ceremonia de entrega de los Premios Globo de Oro se convirtieron en una gran vitrina para los reclamos por la igualdad y en contra de los abusos contra las mujeres.
Los actores y actrices de Hollywood se sumaron al movimiento #MeToo (Yo también) y exigieron justicia racial y de género en la fiesta brindada el domingo por la noche en el Dolby Theatre de Los Ángeles, Estados Unidos.
La Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood brindó los premios en su versión 75 y muchos de los asistentes se sumaron a la convocatoria de ir de negro y con distintivos de “Time’s Up!” (¡Se acabó!), que denuncia el acoso y abusos sexuales que se ejercen desde las posiciones de poder.
Entre los ganadores de la noche se encontraba la película “Three Billboards Outside Ebbing, Missouri”, que trata sobre la venganza de una madre por la violación y asesinato de su hija. La película ganó en las categorías mejor film dramático, mejor actor de reparto, mejor guión, y mejor actriz en film dramático.
Uno de los reclamos más persistentes en estas premiaciones tenían que ver con la descarada discriminación que sufrían los artistas afrodescendientes, algo que comenzó a remediarse al recibir el premio a mejor actor de serie de televisión, Sterling K. Brown. Y también Aziz Ansari se convirtió en el primer asiático estadounidense en recibir un premio.
A su vez, Oprah Winfrey se convirtió en la primera mujer afroestadounidense en ganar el Globo de Oro honorífico por su trayectoria. Incluso, el presentador de la velada Seth Meyers le sugirió a Winfrey que se postulase a la presidencia. Al menos oratoria no le faltaría en lo más mínimo, como demostró con un encendido mensaje al recibir la distinción en el que clamó por la igualdad y deseó que nadie más tenga que admitir haber sido abusada sexualmente.
Algunas de las estrellas de Hollywood han incorporado a su vida el activismo y como muestra de compromiso invitaron a la ceremonia a la periodista puertorriqueña Rosa Clemente y a la sindicalista Saru Jayaraman.