Irán sigue sufriendo las sanciones que le impuso el gobierno estadounidense, lo que está complicando la llegada de la ayuda humanitaria a los afectados por el terremoto del fin de semana.
Las organizaciones de ayuda humanitaria critican al gobierno de Donald Trump por impedir que cualquier ciudadano norteamericano pueda enviar ayuda financiera sin recibir autorización del Departamento de Estado.
Este mismo martes la Casa Blanca aprobó una orden para prohibir al pueblo estadounidense de hacer llegar a Irán cualquier ayuda humanitaria, incluyendo a la Cruz Roja Internacional.
Desde las organizaciones consideran esta medida abusiva e impiadosa, tratándose de hacer llegar materiales y fondos para evitar más muertes o la propagación de enfermedades evitables.
Las oenegés y organismos de labor humanitaria se ven obligados a llevar el dinero consigo para poder solventar los gastos propios de la ayuda humanitaria y para la asistencia d elos damnificados.
La medida de Washington contra el pueblo iraní se adoptó pese a las declaraciones de condolencia y solidaridad de casi todo el mundo, entre ellas de instituciones internacionales.
La inmensa mayoría de los organismos no gubernamentales dedicados a esa labor humanitaria manifestaron su disposición a ofrecer apoyo y ayuda a Irán y a Irak, informaba Prensa Latina.
Hasta el momento el saldo del terremoto de 7.3 grados de la escala de Richter es de casi 500 personas fallecidas, más de ocho mil heridos y la destrucción de miles de viviendas y edificios públicos.