Además, la Sociedad recuerda que el Ministerio abandonó el programa de rehabilitación integral del plantel quiteño, en donde estudian más de 5 000 estudiantes en tres jornadas.
A través de un comunicado, la Sociedad de Egresados Del Mejía (SEM) hizo llegar a la ciudadanía, familiares y relacionados, un mensaje de solidaridad ante lo sucedido con Johana Balladares. Se trata de la estudiante de segundo de bachillerato, que fue golpeada el 31 de marzo y la semana pasada se suicidó.
En el pronunciamiento, los egresados del Colegio Mejía afirman que lo ocurrido con Johanna no es un caso aislado. Dicen que en realidad es una representación de lo que ocurre en la sociedad ecuatoriana, “su desigualdad y del sistema educativo nacional, que hace trizas los sueños de superación de la juventud”.
La Sociedad de Egresados del Mejía menciona que las situaciones adversas y de peligro que se sufre en el interior del colegio responden a un “sistema educativo nacional que abraza el colapso”. Que se debe a que, no existen políticas educativas claras, a la ausencia de autoridades y liderazgos meritorios, a la falta de presupuesto, a la burocracia y el tradicionalismo.
En cuanto a lo sucedido con Johana, afirman que es “otra victima del sistema, de la violencia instaurada por la inoperancia del Estado”. Esto porque no existe una respuesta por parte de las autoridades estatales que garanticen los derechos de la ciudadanía.
“Johana se merece como Mejía, que alcemos nuestra voz y denunciemos lo que ocurre”, dice la Sociedad de Egresados del Mejía. Exige políticas de estado que vayan orientadas a encontrar una solución de todos estos problemas, con leyes de rehabilitación social y políticas publicas de prevención, de uso provechoso y recreativo del tiempo libre junto a las inversiones en lo social, educativo, salud y vivienda. Además de proyectar un correcto presupuesto a universidades e institutos superiores.
El domingo, el Ministerio de Educación se pronunció en torno a las denuncias de madres y padres de familia del Colegio Mejía, que afirman que Johana habría sido víctima de acoso escolar y de agresiones físicas, por parte de otro estudiante. Al menos dos semanas atrás, la adolescente habría recibido una golpiza dentro del colegio. Producto de eso le habrían dicho que no volvería a caminar.
En un comunicado, el Ministerio dice: «Lamentablemente constatamos que no se presentó la denuncia por parte de los padres de familia ni tampoco por la institución educativa. Seguimos investigando sobre este hecho, para aplicar la normativa y las sanciones contempladas en la normativa vigente». No ha indicado qué sanciones habrá para las autoridades del colegio.
Por otro lado, la Sociedad de Egresados denunció el abandono del programa de rehabilitación integral del Colegio Mejía y el abandono de áreas que eran de recreación y aprendizaje.
El jueves pasado, Radio Pichincha solicitó una entrevista al Ministerio de Educación, para conocer cuáles acciones están tomando, pero hasta hoy, desde Comunicación dijeron que no existe un vocero todavía.
Fraternidad Diablada Mejía se pronuncia también
Preocupados por lo que ocurre en el colegio, la Fraternidad Diablada Mejía también se solidarizó con la familia de Johana. Exigen a las autoridades correspondientes investigar de manera transparente
qué hizo que la estudiante del Mejía tome la decisión de suicidarse. Además, piden la sanción de las personas involucradas en este suceso. “Hacemos un llamado a cada instancia de todo lo que
representa el Instituto Nacional Mejía, podemos cambiar y mejorar para que
nunca mas se repita un hecho como este”.
Asimismo, invitan a las autoridades de la institución y a los egresados a generar un espacio de diálogo y defensa para que se aclaren los hechos y mejorar los protocolos y reglamentos, “para impedir que hechos como este se repitan”. Finalizan recalcando la necesidad de conversar y dialogar para una búsqueda
de la verdad y defensa del Mejía.
Autora: Karen Vizcaíno