Theresa May, la primera ministra del Reino Unido, mantuvo su cargo ayer, luego de que durante la moción de confianza, 200 de los representantes de los Conservadores la apoyara, contra los 117 que pedían que diera un paso al costado.
May, previamente, se había comprometido a no volver a postularse para liderar el centenario partido. De esta manera, será ella y su gabinete el que culmine el proceso del brexit, la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea.
Por un año los conservadores no podrán volver a exigir una moción de censura, aunque eso podría ocurrir desde la oposición que encabezan los laboristas.
“El resultado de la votación de esta noche es que el grupo parlamentario tiene confianza en Theresa May”, sentenció Graham Brady, presidente del Comité 1922, que reúne a los diputados conservadores.
En una breve conferencia de prensa frente a la residencia de primera ministra, en Downing Street, May confirmó que seguiría trabajando en los detalles de la salida de la UE y dijo haber escuchado lo que han expresado sus compañeros de partido.
En el día de hoy, tiene previsto reunirse en Bruselas con los líderes de los 27 Estados miembros de la Unión Europea para continuar elaborando los mecanismos de seguridad del acuerdo de salida de la comunidad multinacional.