La Policía Nacional le abrió otro sumario administrativo por falta grave al coronel Wilson Torres, 10 días después de que ofreciera una entrevista.
Punto Noticias. La Policía Nacional intenta, nuevamente, silenciar al coronel Wilson Torres. Le abrió otro sumario administrativo por “emitir información relativa a la institución, que contraviene sus directrices de comunicación”.
En entrevista con el medio digital GK, Torres habló de, “la falta de autonomía en la Policía Nacional y el intento de silenciamiento de voces críticas por parte de generales en altos cargos de poder como Fausto Buenaño y Mauro Vargas”.
El coronel Wilson Torres dijo que esa entrevista, del 16 de marzo de 2023, podría causarle una nueva sanción. Pero aseguró que asumirá las consecuencias de este amplio testimonio sobre la situación policial y su propia experiencia “defendiendo la libertad de expresión” en la Policía.
Ni 10 días tardó la Policía Nacional en abrirle un sumario administrativo por una falta grave. La denuncia le llegó al director de Asuntos Internos a través de un parte policial.
Su ‘falta’ fue incumplir la normativa titulada: “Comunicación en redes sociales para su correcta utilización y aplicación por parte de los servidores policiales”, que tiene como objetivo cuidar la imagen institucional.
Mientras Torres denunciaba la falta de recursos o equipamiento para los patrullajes, un grupo de uniformados monitoreó sus redes sociales, monitoreo los medios de comunicación y realizó el parte policial para la denuncia.
Dicha normativa se emitió durante la gestión del censurado exministro del Interior, Patricio Carrillo. “Su objetivo es que nadie hable de lo que sucede al interior de la Policía”, dijo el abogado de Torres, Alberto Montenegro, quien reprochó el seguimiento a los uniformados que denuncian las irregularidades en la institución.
El coronel Torres ya fue sancionado por una falta leve, por ejercer su derecho a la libertad de expresión y denunciar la realidad institucional en una cuenta de Twitter. Antes, hubo varios intentos fallidos por sancionarlo. Ahora, está en la mira de la cúpula policial.
El coronel deberá defenderse, presentar sus descargos y, finalmente, la dirección de Asuntos Internos decidir si lo sanciona o no.
Montenegro reclamó que la Policía admita estas denuncias y no las que están dirigidas a los altos mandos, como la que presentaron contra los generales Mauro Vargas y Giovanni Ponce –vinculados al caso El Gran Padrino-, pero que nunca se tramitaron. «Dejaron que se vayan de la Policía Nacional sin investigación ni sanción alguna».