El video es otro indicio en la investigación del triple crimen, ocurrido en Esmeraldas. Sus cuerpos fueron encontrados con signos de tortura.
Punto Noticias.- El análisis de la línea de tiempo desde que Nayeli Tapia, Denisse Reyna y Yuliana Macías salieron de Santo Domingo de los Tsáchilas y los medios que usaron para llegar a Esmeraldas permitió encontrar un nuevo indicio para descubrir quiénes son los responsables de sus muertes.
Cámaras del ECU-911 habrían registrado a las jóvenes junto con dos hombres, el día de su desaparición. La Policía analiza las imágenes para identificar a los desconocidos.
Los uniformados de Santo Domingo de los Tsáchilas, Esmeraldas y hasta de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro de la Policía Nacional (Dinased) cruzan información de lo que van encontrando.
El comandante de la Subzona de Policía de Santo Domingo, Jhofre García, informó que las víctimas salieron desde Santo Domingo de los Tsáchilas con destino a la playa. Dijo que ubicaron a dos vehículos y que uno de ellos habría trasladado a las jóvenes hasta Quinindé. Al menos, eso es lo que se conocía días atrás.
García tiene claro que el automotor fue alquilado en Santo Domingo de los Tsáchilas y tras ser localizado permanece retenido. Pero más allá de esos primeros indicios, también salió a la luz que un hombre rentó un vehículo en Santo Domingo y lo entregó a una tercera persona, que estaría involucrada en el triple crimen.
Anteriormente se conoció que las chicas salieron desde Santo Domingo con rumbo a la playa y para ello alquilaron junto con otros amigos un vehículo.
García expresó que el automotor fue alquilado en esa jurisdicción y tras ser localizado permanece retenido.
Según Paulina Rueda, coordinadora provincial del Observatorio Ciudadano Contra la Violencia de Género, tía y representante artística de Yuliana, la joven salió de casa el martes 4 de abril, a las 20:00.
Dos días después sus familiares pusieron la denuncia de su desaparición. Sin embargo, ella y sus amigas habrían sido asesinadas el 5 de abril. Sus cuerpos fueron encontrados a orillas del río Esmeraldas, a la altura del recinto 5 de Agosto, con dirección al Valle del Sade, en Quinindé.
Un pescador realizó el descubrimiento de los cadáveres que presentaban signos de tortura con armas cortopunzantes.