Reformas que inteligentemente se vienen proponiendo desde hace rato como aumentar la edad de jubilación porque ha aumentado la esperanza de vida, agregó.
Fernando Cordero, expresidente del Directorio del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y exasambleísta, recordó que hace cuatro años el IESS gozaba de buena salud porque además contaba con tres millones de afiliados, a diferencia de hoy en día donde hay menos de 700 mil aportantes debido a la pandemia que le cayó del cielo al Ejecutivo para poder eliminar el empleo pleno: “Hasta los médicos fueron despedidos”.
Destacó que ahora la entidad necesita reformas que inteligentemente se propusieron en el anterior Gobierno como aumentar la edad para la jubilación porque un estudio determinó que se ha incrementado la esperanza de vida, por ello el objetivo era ir subiendo cada dos años, un año de edad para acceder a ese beneficio hasta llegar a los 65 años.
Reconoció que efectivamente los recursos actuales no alcanzan para proteger la salud a los menores de 18 años, sin embargo indicó que el IESS no puede dejar de ser solidario ni mucho menos pensar en convertirlo en un ente de cuentas donde el que más paga tiene mejor servicio, puesto que eso ocurrió en Chile y le ha costado grandes inequidades y por ende un estallido social.
Cordero además resaltó que para privatizar el IESS el Ejecutivo debería impulsar una Asamblea Constituyente.