Según datos de la Policía Nacional, el promedio semanal de sicariatos bajó de 10 a 9.
Punto Noticias.- El pasado jueves 30 de junio, finalizó el estado de excepción en Manabí, Esmeraldas y Guayas, para enfrentar el incremento de muertes violentas en esas provincias. El Mayor Marcelo Vinueza, jefe del DAI de la Policía Nacional, hizo un balance de los 60 días que duró el Decreto Ejecutivo 411 en Guayaquil, y afirmó que hubo un descenso en los actos delictivos.
“Se hizo un comparativo, los 60 días del estado de excepción, comparado con 60 días antes del estado de excepción. Podemos ver, un promedio de 10 muertes violentas semanales que hubo antes del estado de excepción. Y con el estado de excepción, hubo un promedio de 9 muertes violentas”.
Este leve descenso en los hechos delictivos, también son percibidos por varios pobladores. Así, por ejemplo, lo menciona el ciudadano Andrés Rezabala, que reside en la provincia de Guayas: “Disminuyó la delincuencia, pero no sé si ahora sigan robando (…). Acá en mi cantón (Bucay), no he escuchado de robos ahora”.
Resultados
El Mayor Vinueza informó que en el Distrito Metropolitano de Guayaquil hubo 97.701 operativos, que permitieron la detención de 2.287 ciudadanos. Se decomisaron 334 armas de fuego y fueron desarticuladas 19 bandas organizadas. Además, se decomisaron 14.454,37 kilogramos de droga, se retuvieron 173 y otras 145 fueron recuperadas. En cuanto a vehículos, se retuvieron 185 y se recuperaron 177.
Sin embargo, los hechos violentos siguieron sucediendo en estas tres provincias. El 25 de mayo, por ejemplo, la fiscal de Manabí, Luz Marina Delgado, junto con un abogado que la acompañaba, fueron asesinados al estilo sicariato mientras viajaban en su vehículo en Manta. De igual forma, el 23 de junio, el agente de tránsito Hugo Samuel Mendoza fue acribillado por otro sicario mientras jugaba fútbol en una cancha de Manta.
Percepción
Pese a este panorama, la periodista esmeraldeña Estefanía Reyes indica que el estado de excepción ayudó a reducir los actos delictivos, que en varios sectores ya eran insostenibles. «Acá en Esmeraldas, lo que ha hecho básicamente el estado de excepción fue desplegar a los militares y esto ocasionó que, sí, efectivamente, disminuya en gran medida el número de altos índices de inseguridad”.
La periodista agregó que en Esmeraldas había alrededor de tres a cinco sicariatos al día. Sin embargo, con la medida del Gobierno, los índices de criminalidad disminuyeron. “Esto garantizó un poco de seguridad, ya que los negocios, por el alto índice delincuencial, tenían que cerrar a tempranas horas. Los comercios en el centro de la ciudad cerraban alrededor de las 5 de la tarde”.
El Mayor Vinueza, en este contexto, anunció que los operativos seguirán efectuándose en las tres provincias del país, con la colaboración de las Fuerzas Armadas.