El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales, se manifestó en contra de la decisión del gobierno ecuatoriano de retirarse de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA). A su vez, se mostró dispuesto a seguir bregando por la unidad y soberanía de América Latina, pese a la traición de algunos gobiernos a los mandatos de sus pueblos.
“Lamentamos decisión del gobierno ecuatoriano de retirarse del ALBA, dando la espalda a la integración de la #PatriaGrande”, publicó Morales en Twitter este domingo, luego de que el jueves, el canciller José Valencia anunciara el abandono del ALBA, como respuesta a la salida de venezolanos del país.
El éxodo de los hermanos latinoamericanos y el enfrentamiento de la crisis humanitaria que vive Venezuela, para el gobierno ecuatoriano requiere de “una solución de todas las naciones” de la región.
Resulta extraño que se propicie una solución conjunta y se desmiembren espacios de integración como ALBA y Unasur.
El ALBA es un proyecto de colaboración y complementación política, social y económica entre países de América Latina y el Caribe, promovida inicialmente por Cuba y Venezuela como contrapartida del ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas), impulsada por los Estados Unidos.
Tras los cambios de timón de varios los países de la región, hoy por hoy, el ALBA lo integran: Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, Dominica, Nicaragua, San Vicente y Granadinas.