Si las calles peruanas están siendo el escenario del rechazo popular al indulto al genocida Alberto Fujimori, ahora que el expresidente recibió el alta médica la consigna de #IndultoEsInsulto se hace más fuerte.
El indulto fue otorgado el 25 de diciembre por el presidente Pedro Pablo Kuczynski, luego de que en 2009 fuera condenado a 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad. Se sospecha que a cambio de los votos que permitieron que PPK no fuera cesado en sus funciones con un pedido de vacancia solicitado en el Congreso y donde el bloque de Kenji Fujimori (hijo del dictador), evitó la destitución.
En la noche de ayer, Alberto Fujimori, salió de la clínica Centenario Peruano Japonesa donde estaba ingresado y se dirigió a La Estancia, el condominio donde vivirá a partir de ahora.
No solo muestras de repudio circulan en Perú, muchos fujimoristas comienzan a celebrar la libertad del represor, a quien muchos señalan como “salvador” por haber enfrentado al “terrorismo”.
El indulto había sido otorgado como “humanitario”, justificándolo por enfermedades graves que supuestamente padecía el criminal de lesa humanidad, sin embargo sorprendió que subiese a la camioneta de su hijo por sus propios medios, que se sacara una selfie junto a su hijo y que luego mantuviera conversaciones vía celular.