Este personaje internacional sostiene que el denominado Lawfare es utilizado para perseguir políticamente a los líderes progresistas.
Punto Noticias. A la judicialización de la política se la conoce con la palabra Lawfare. Ernesto Samper, exsecretario general de la UNASUR y expresidente de Colombia, señaló que prefiere hablar de guerra jurídica.
Para Samper, la judicialización de la política es un nuevo tipo de guerra intervencionista, que se ha venido desarrollando en América Latina en los últimos años, como consecuencia del cambio del sistema de administración de justicia, desde un sistema inquisitivo a un sistema de carácter acusatorio.
“En el viejo sistema inquisitivo se respetaban figuras como la presunción de inocencia, el derecho a la intimidad, la valoración de las pruebas. Y era el Estado el que tenía que demostrar la culpabilidad del procesado. En el nuevo sistema de carácter acusatorio, que yo llamaría la justicia neoliberal, es una justicia negociada, en la cual se negocian los testigos, las declaraciones; hay una especie de negocio alrededor de la justicia”, señaló.
Lo más grave, para esta figura internacional, es que este sistema de administración de justicia, que está implantado en la región desde hace unos 20 años, es calcado del sistema acusatorio norteamericano, que de alguna manera permite que fiscales, jueces e investigadores sirvan, como está viéndose en el caso de Ecuador, de Brasil con Lula y de Argentina con Cristina Fernández, para perseguir a dirigentes progresistas, utilizando el arma más venenosa que tiene el sistema democrático que es la justicia.
A criterio de Samper, estas guerras jurídicas son desarrolladas por los poderes fácticos, que han venido reemplazando el papel que cumplían los partidos políticos, que están desacreditados por la opinión.
“En los poderes fácticos están grandes conglomerados económicos, grupos comunicacionales, jueces y fiscales que son protagonistas mediáticos, organizaciones no gubernamentales internacionales. Todos responden a ideologías de derecha”, aseveró Samper.