Los diputados haitianos votaron para desplazar del cargo de primer ministro a Jean-Henry Céant, que apenas duró seis meses en el cargo. Así que desde la mañana de hoy, Haití no tiene gobierno y el presidente Jovenel Moise debe volver a conformar un gabinete.
La moción de censura fue aprobada por 93 votos a favor, seis en contra y tres abstenciones. Moise deberá consensuar con los dos bloques parlamentarios el nuevo primer ministro.
Para los principales medios en Haití, las labores de Céant se miden en fracasos y no pudo mejorar la situación de la ciudadanía, ni resolver la compleja crisis de credibilidad que tiene el gobierno haitiano.
El primer ministro estaba fuera del país en el momento de ser cesado y su portavoz, Pascal Adrien, aseguró que Céant seguirá en Marruecos, donde está en visita oficial.
Los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional pusieron al presidente Moise contra las cuerdas, obligado a reducir el déficit fiscal y recortando subsidios y ayudas a la población. El descontento no ha encontrado freno y las movilizaciones se suceden reclamando su renuncia y la convocatoria a nuevas elecciones.
A una economía en estado terminal se suma la represión que ha costado la vida de decenas de personas, empantanando toda posibilidad de diálogo.