Alerta el analista Fernando Casado, quien señala que tanto la Relatoría como la CIDH tienen una visión parcializada, y no precisamente a favor de los ciudadanos.
Punto Noticias. En opinión del experto internacional Fernando Casado, hay que estar muy atentos al informe que, sobre los hechos sucedidos durante las protestas de octubre en Ecuador, presenten la misión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la OEA.
Casado alerta que especialmente el representante de esta Relatoría es elegido con injerencia de la CIDH, organismo que, aunque en principio vela por la protección de los derechos humanos, tiene un sesgo muy pronunciado a la hora de emitir sus informes, en distintas realidades.
“De hecho, lo estamos viendo ahora en Bolivia, con lo que está ocurriendo y el rol que está jugando la OEA, por un lado, y también este tipo de organismos”, apuntó.
A decir del analista, Edison Lanza, de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, pertenece a una antigua visión sobre esta materia, que tiene un corte de carácter liberal, donde no se mete en temas, por ejemplo, como el comportamiento de los medios de comunicación, que es fundamental para entender lo que ocurre en Ecuador, cuando se hace la cobertura de unas noticias versus otras.
A su criterio, no hay que ponerle tanta fe en los informes de estos organismos, porque vamos a tener una visión muy parcializada de la realidad, porque, para citar, Lanza no habla de la falta de pluralidad que los medios de comunicación tuvieron a la hora de cubrir las protestas, que explica por qué los manifestantes tuvieran tanta desconfianza, e incluso animadversión, hacia esos medios.
Aunque no justificó las agresiones contra los periodistas, por parte de la gente que protestaba, Casado anotó que es curioso que, para esos periodistas, los manifestantes muertos y detenidos, en el mejor de los casos, eran una cifra, no un nombre.