El pasado 16 de octubre de 2020, el presidente del Consejo Directivo del IESS, Jorge Wated, señaló que, en una primera investigación, se detectó más de $5,7 millones en medicamentos caducados en varias unidades de salud del Seguro Social.
Punto Noticias: El martes 10 de noviembre de 2020 se constató que existen fármacos, insumos, equipos y unos 17.000 rollos de papel higiénico almacenados en una bodega.
Casi dos semanas después de hallar miles de medicamentos caducados dentro de las bodegas del hospital Carlos Andrade Marín, del IESS, en Quito, se reportan nuevamente estos hallazgos en otra bodega.
La situación en este lugar es similar a la de las otras bodegas, la medicina que ya venció permanece junto a otra que aún es útil. Aquí también hay varios documentos que, según explica el jefe de bodega, Miguel Merchán, son «archivos clínicos, temas contables o de talento humano».
Xavier Orellana, director técnico del Carlos Andrade Marín, denunció que la humedad y el inadecuado almacenamiento hicieron perecer, por ejemplo, fórmulas para bebés prematuros.
«Nos hemos encontrado con fórmulas infantiles que han estado caducadas desde el 2017. Habría que investigar si se siguió el debido proceso de canje, fueron donaciones o cuál fue la manera de adquisición de este producto», señaló el funcionario.
Orellana también indicó que existe un perjuicio de unos $6 millones entre todos los fármacos e insumos caducados encontrados en la casa de salud.
Respecto al papel higiénico, los funcionarios señalan que lo adecuado es almacenar este producto para máximo doce meses. Sin embargo, en 2018, en este hospital del IESS se compró para más de dos años.
Por otra parte, en los exteriores de la bodega hay un cementerio de equipos médicos que estarían abandonados desde 2006.
El pasado 16 de octubre de 2020, el presidente del Consejo Directivo del IESS, Jorge Wated, señaló que, en una primera investigación, se detectó más de $5,7 millones en medicamentos caducados en varias unidades de salud del Seguro Social.
Cinco de los centros de salud que registran más pérdidas están ubicados en Quito.
No es la primera vez que en el Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM), del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), se habla de medicamentos caducados. En 2019, la actual gerencia denunció un perjuicio de casi $7 millones del 2012 al 2018, por lo que Fiscalía empezó una indagación.
Actualmente, Fiscalía continúa realizando las diligencias en este sanatorio de Quito. Existen siete indagaciones más.
Para Germán Rodas, de la Comisión Anticorrupción, y Gustavo Dávila, de la Alianza Nacional por la Salud, el IESS arrastra problemas estructurales graves, como la corrupción o la falta de representación de los trabajadores.
Además, Dávila señala que es “indignante que se haya dejado caducar medicinas, con las cuales se pudo salvar la vida de los pacientes”. Espera que finalmente las denuncias “no caigan en saco roto”. (C.D.A.)
FUENTE: Ecuavisa