La mañana de este lunes, a primera hora los familiares del equipo periodístico de diario “El Comercio” -asesinado por el grupo disidente de las FARC, Oliver Sinisterra, liderado por alias «Guacho»- mantuvieron una reunión con representantes del gobierno nacional.
Ricardo Rivas, Yadira Ayaguallo y Patricio Segarra acudieron a la reunión convocada por la ministra de justicia Roxanna Alvarado y con el secretario de la presidencia, Juan Sebastián Roldán.
Llegaron con una exigencia en concreto, localizar y recuperar los cuerpos de sus seres queridos. Sobre esto ya hay un acuerdo en concreto, indicó Ricardo Rivas. “Hemos pedido que sea la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) la que presida el comité independiente”.
Tras la reunión se estableció que el Gobierno acelerará los procesos para la repatriación de los cuerpos y para la conformación de un Comité Internacional independiente que investigar lo sucedido en la frontera norte, además que el Ministerio de Justicia será el vocero en este caso..
Yadira Aguagallo, novia de Paúl Rivas, fotógrafo asesinado, manifestó que «tomamos la palabra de las autoridades de comprometerse en este caso y lograr el primer objetivo: la repatriación de los cuerpos porque merecen un descanso digno», dijo Aguagallo.
Juan Sebastián Roldán, enfatizó que el gobierno no se opone a que la CIDH sea parte de esta comisión. ”Nos parece bien que se conforme la comisión con integrantes de las CIDH, y otros organismos que puedan organizar la transparencia de la información”, indicó el funcionario.
También se refirió a la situación de los otros dos secuestrados por alias Guacho, Oscar Villasis y Kathy Velasco. “Las vidas de esas personas están en Colombia, por eso el Ecuador ha conminado al gobierno colombiano a que lleve adelante los procesos, ellos fueron secuestrados en Colombia. Todo el proceso se ha llevado en Colombia, la UNASE de nuestro país ha ofrecido la ayuda (…), pero el gobierno ecuatoriano no puede hacer nada, si todo está en territorio colombiano”.
Posterior a esta reunión, los familiares hablarán con representantes de la Cancillería, a quienes solicitarán «la mayor acción, responsabilidad, sensibilidad y participación para que ejerzan la presión a Colombia».