La agente fiscal Michell Luna destacó que el caso de María Jose Coronel evidencia la selectividad de la justicia en el Ecuador.
Michell Luna, agente Fiscal del Guayas y delegada de la Asociación Nacional de Fiscales del Ecuador, Núcleo Guayas, señaló que el comportamiento de María Josefa Coronel, durante su desempeño como directora provincial de la Judicatura siempre fue dudoso.
Luna explicó que las denuncias contra María Josefa Coronel se receptaron mediante un correo que se creó para el efecto. Ahí algunos funcionarios judiciales habrían alertado de supuestos amedrentamiento de la entonces directora provincial de la Judicatura.
“Sin embargo, ella fue premiada con un consulado en Miami, porque cuenta con respaldo político abismal”, agregó.
Según Michel Luna, la abogada María Josefa Coronel supuestamente ingresaba a los despachos de jueces para exigirles “cosas” y en caso de no acatar sus órdenes, los cambiaba de despacho o cantón: “Los perseguía con sumarios. A mí me persiguió con sumarios”, aseguró.
Michell Luna recordó que estas denuncias se presentaron en la anterior Asamblea Nacional y fueron públicas, pero lamentablemente, el expresidente de la República, Guillermo Lasso, decretó la muerte cruzada y las denuncias quedaron en nada.
“La denuncia se hizo de manera pública, lo supo todo el Ecuador, yo continué siendo perseguida por las mismas autoridades que la colocaron a ella, y ella fue premiada con un consulado en Miami, cuando digo que la justicia es selectiva, lo es”, mencionó.
Recursos para el sistema judicial
La agente fiscal, Michell Luna, manifestó que desde el 2019 se ha solicitado a la fiscalía General que se dé seguridad a los funcionarios, pues durante la administración de Diana Salazar ya han sido asesinados, siete fiscales.
“NO nos oponemos a la labor de la fiscal, ni a sus autoridades, enmarcadas en derecho, pero no aceptamos que le esté costando la vida a los compañeros y a otros vivir con miedo”, puntualizó.
Luna comentó que por exigir seguridad y levantar su voz, tanto ella, como los fiscales Darwin Muñoz y Fernando Bonoso, fueron sancionados. El primero fue cambiado de cantón, el segundo fue trasladado a una Unidad distinta y en cuanto a Michell Luna tuvo una sanción disciplinaria con el descuento del 10% de su salario.
“Pero nuestros compañeros pudieron recibir protección a víctimas y testigos y resguardo policial”, acotó.
Pese a ello, la agente fiscal reconoció que aún quedan temas pendientes, como la falta de vehículos para el traslado de funcionarios, tampoco se cuenta con espacios decentes o suministros de oficina.
Para Michell Luna también es importante que se evalúe a los fiscales con reglas claras y sin mañoserías, a fin de detectar a quienes tengan comportamientos irregulares e incluso cuyo patrimonio no sea justificado.