Editorial de Radio Pichincha
Con el inicio de clases se detecta lo que para algunos no tiene que ver con la política, pero que en la práctica es determinante. Es decir: el alto costo de llevar a nuestros hijos a la escuela.
Según varios testimonios de padres de familia, en una escuela privada, no de la élite, el costo de uniformes y los útiles escolares podría variar entre 300 y 500 dólares, dependiendo de la institución escolar. Y de esto don Guillermo no dice una palabra. Claro, no es de su interés, no está en su esfera de atención, porque en la práctica eso JAMÁS LE IMPORTÓ, NUNCA TUVO COMO PRIORIDAD HACER REALIDAD EL DERECHO A UNA EDUCACIÓN GRATUITA Y DE CALIDAD.
Si ponemos un ejemplo muy común la situación se agrava: ¿qué pasa con una familia con dos o tres niños en edad escolar y tienen que pagar esos costos? ¿Y si se trata de una escuela fiscal no es casi lo mismo?
El encarecimiento no es ajeno a la política, como algunos quieren hacernos creer. La política pública determina las condiciones sociales de un país. Si ya nos olvidamos de que hace no muchos años eran gratuitos los uniformes, los útiles escolares y el desayuno no era por causa de un milagro o un hecho fortuito, sino por una decisión política que incide en la sociedad.
De eso les corresponde hablar a los candidatos y candidatas. Y de eso le toca hablar a nuestras familias para que decidan por qué tipo de modelo quieren optar en las próximas elecciones. Pues ya nos dijo una de las candidatas a la vicepresidencia que había que privatizar la educación, que el Estado no se puede hacer cargo de todo y que es solo así se puede asumir un nuevo momento para el Ecuador.
La política es eso, no cabe duda. Tiene que ver con la vida cotidiana, con los derechos a la educación y a la salud, la seguridad y el bienestar. Nunca nos dijo don Guillermo cómo iba a garantizar esos derechos en su campaña electoral y ahora tenemos resultados concretos. Por el contrario, ofreció liberar el ingreso a las universidades y unas cuantas propuestas demagógicas y ahora está a la vista SU POLÍTICA.
No está demás decir también que antes un ciudadano con un vehículo Aveo gastaba en gasolina 200 dólares y no pagaba impuestos, ahora paga 200 dólares en impuestos y 350 dólares en gasolina al mes. ¿Eso fue producto de una catástrofe, un terremoto o una desgracia general? NO, eso fue decisión de la política de un Gobierno que privilegió sus negocios y no las necesidades de la gente. PUNTO